Libros que leí en 2022

Este 2022 pude cumplir mi reto Goodreads de leer 14 libros. Hubo una racha en la que incluso pensé que conseguiría más, pero no ocurrió. En parte se debió a que casi al final del año me enfoqué en ver montones de videos de YouTube (la mayoría bastante educativos) y hartas películas y series como ya tenía rato que no hacía. Adicionalmente, entre artículos en línea y hojas sueltas, hay mucha lectura que me aventé este año, aunque no se vea reflejada, así que me puedo sentir satisfecho. Pasemos ahora sí con los libros.

La lista y las reseñas completas las pueden leer en mi perfil de Goodreads, si desean añadirme. En definitiva, el menos relevante de mi lista sería Pesadillas para cenar de José Madero. Soy honesto, lo compré solo porque me he vuelto muy fan del cantante; pero pues, es un libro X, una historia muy boba de terror dirigida al público juvenil. El mismo autor ha dicho que los hace porque sabe que se venden bien y de hecho acaba de sacar un segundo libro con el mismo estilo.

Los siguientes en mi lista serían La ciencia de la ciencia ficción, que es un audiolibro que analiza la ciencia que se muestra en las películas y qué tan fuerte es el respaldo científico y qué tan probable es que se pueda volver una realidad. No está mal, pero quizá no llegó en mi momento adecuado. Por cierto, su autora, Eric Macdonald, es una astrofísica que ha trabajado como consultora científica de franquicia Star Trek, lo que quizá explica porque las alusiones a esta serie abundan en el audiolibro. En el mismo nivel pongo a Alimentación Fit-Inteligente, este es un libro electrónico del doctor y creador de contenido Santiago Espinosa. Es un buen libro, con el mejor respaldo científico, y la verdad me ayudó mucho cuando estuve implementando el ayuno intermitente, así como mi regreso al gym. Lamentablemente, como libro electrónico, tiene muchas deficiencias: enlaces que no sirven, ilustraciones de mala calidad, mala organización, en fin, errores de alguien que se está iniciando en la escritura de libros.

El siguiente en mi lista sería Apología de Sócrates. Se trata de un clásico, escrito por Platón, discípulo de Sócrates, que se centra en el discurso que el filósofo pronunció como defensa ante el tribunal de Atenas, acusado de corromper a la juventud y de no creer en los dioses. Declarado culpable y obligado a elegir su castigo, Sócrates elige morir como mártir, bebiendo la cicuta. «Quizá me dirá alguno: ¿No tienes remordimiento, Sócrates, en haberte consagrado a un estudio que te pone en este momento en peligro de muerte? A este hombre le daré una respuesta muy decisiva, y le diré que se engaña mucho al creer que un hombre de valor tome en cuenta los peligros de la vida o de la muerte. Lo único que debe mirar en todos sus procederes es ver si lo que hace es justo o injusto, si es acción de un hombre de bien o de un malvado».

Mejorando las charlas es un libro de autoayuda para fomentar las pláticas superfluas que pueden terminar por convertirse en conversaciones significativas. Tiene buenas sugerencias, aunque a los retraídos como yo siempre nos termina por fallar la ejecución. Hábitos Atómicos es otro buen libro de autoayuda que disfruté bastante. Está bien estructurado y distribuido, incluye resúmenes al final de cada capítulo y presenta una propuesta sólida con la intención de moldear nuestro comportamiento. Hablar con extraños no es exactamente un libro de autoayuda, pero contiene puntos valiosos. Podría resumirse en una colección de situaciones donde la interacción entre extraños acaba terriblemente mal, tan mal como un asesinato, un suicidio o una violación. Las interacciones con extraños siempre son necesarias, así que el autor analiza lo que sale mal y el aprendizaje que dejan estas situaciones. Muy recomendable.

Entre los libros autobiográficos, hay cuatro, aunque uno lo dejaré para el final. Tenemos Vigilancia Permanente, de Edward Snowden y que recomiendo bastante en vista de lo complejo que se está volviendo navegar en el ciberespacio y los temas de privacidad que cada día cobran más relevancia. Debe quedarnos claro que, en Internet, siempre nos están vigilando. Con Orgullo Prieto tengo mis reservas. Coincido en muchos puntos con la lucha que Tenoch y otros están haciendo contra el racismo, pero no dejan de convencerme sus formas. De cualquier forma, lo recomiendo para abrirse al diálogo. Ante todo, no hagas daño, es un recuento de historias del neurocirujano británico Henry Marsh. Básicamente para decirnos que, aunque no lo parezca, los doctores también tienen sentimientos y que a veces también les duele ver morir a los pacientes, pero deben aprender a sobrellevarlo y continuar. Estuvo regular.

Entramos a la recta final. El cuerpo humano: Guía para ocupantes y Una breve historia de casi todo son del mismo autor, Bill Bryson y, honestamente, son buenísimos. Un buen ejemplo de lo que los textos de divulgación científica deberían ser: digeribles y entretenidos. El resultado es que, uno quiere más. Por supuesto, Bill Bryson no es científico, sino escritor, un escritor apasionado por estos temas. Así que el rigor científico de algunas afirmaciones no sea tan sólido, pero creo que le permite al lector despertar la suficiente curiosidad para indagar más. A lado de ellos pongo Imparables de Yuval Noah Harari. Esta es una versión resumida, dirigida a un público joven, de su obra Sapiens. Y al igual que las otras dos citadas antes, cumple muy bien su objetivo de enganchar al lector y despertar su curiosidad. Esta va acompañada de buenas ilustraciones y un diseño que me ha gustado. Las tres obras son totalmente recomendables.

Deje para el final Conexiones de Karl Deisseroth. Es un libro complejo que estuvo a punto de abandonar. Me costó mucho trabajo pasar del principio e incluso tuve que releerlo varias veces, pero finalmente me cautivó bastante. Además, es un libro que habla de una tecnología quizá aún en pañales, pero con un potencial tan grande que puede resultar incluso aterrador: la optogenética. Algunos experimentos con ratones arrojan resultados que solo hemos visto en películas: el control de su ira, entre otros comportamientos, con un simple rayo de luz. En cada capítulo, Deisseroth, que es psiquiatra, se enfoca en un desorden mental y aborda lo que, en parte, la optogenética ha permitido desvelar al respecto sobre ese misterioso órgano que es nuestro cerebro. Creo que ha sido el favorito de este año.

Con eso concluyo. Ya veremos cómo nos va en este 2023