Entre muros – Entre les murs

Entre les murs«Entre muros» es una película francesa que nos cuenta la historia de François, un profesor de francés de una secundaria pública multirracial en un suburbio parisino. Al principio yo esperaba una de esas clásicas historias «hollywoodenses» que inician con un grupo de alumnos problemáticos que odian al profesor y que terminan con el maestro siendo su mejor amigo y los chavitos superándose. Error. La película no hace más que mostrar la realidad de lo que puede ser un año escolar. Es una verdadera reflexión acerca de la cada vez más dificil labor de los profesores.

Basada en una novela semiautobiográfica del mismo nombre, del escritor y profesor François Begaudeau, la película toma tintes de documental. Aunque dura 128 minutos y pudiera parecer aburrida dado que la mayor parte se centra en diálogos que ocurren en un aula de clase, increíblemente el filme resulta bastante entretenido y hasta cómico. François es un profesor ingenioso, tolerante, abierto al diálogo y a la crítica. Se pone al nivel de los estudiantes lo que abre oportunidad de que expresen lo que piensan abiertamente. Irónicamente esta misma actitud pondrá a François en un dilema al final de la película.

La película ganó la Palma de Oro en Cannes y quedó nominada a mejor película extranjera en los premios Oscar. Esto sin duda atrajo la atención de muchos que nos lanzamos a verla gracias a que el FICCO la trajo al país. La sala de cine, como el aula de Françoi, era multiracial. A mi lado había un chico japonés que al parecer esta aprendiendo español y que parece que le sufrió con la película (la película esta en francés y tenía subtitulos en español e inglés), el japonés al parecer leía los subtitulos en inglés, pero dado que muchos de los diálogos tenían que ver con conjugaciones, gramática y demás, supongo no era nada fácil. Al frente como cuatro mujeres francesas que supongo que se sintieron como peces en el agua. Por otros lados veías a uno que otro gringo «chilango» (ja ja). Una sala bastante llena para un filme no tan comercial.

Ojalá y llegué al Blockbuster o tengan oportunidad de verla directamente en el cine. En lo personal me hizo recordar viejos tiempos y reflexionar sobre la cantidad de retos que tiene esta profesión. A mi si me hubiese gustado ser profesor y hasta cierto punto creo que tengo madera. Siempre me ha parecido una labor admirable, claro hablando de los profesores que saben hacer su trabajo, porque hay otros tantos que ni lugar de mención tienen aqui. Bien se ha dicho que con frecuencia los profesores que nos presionaban bastante y nos hacían la vida imposible suelen al final (léase algunos años después de dejar de tomar clase con ellos) ser bien apreciados y recordados. ¿O no lo creen ustedes asi? Muchos de ellos fueron los que aportaron cosas realmente valiosas a nuestra enseñanza y porque no decirlo, a nuestras vidas.

Y por último, aunque sé que cometeré el grave pecado de omitir a varios, aprovecho para hacer una pequeña lista de profesores que se me vienen a la mente porque valieron la pena haberlos conocido en mi vida.

Raúl Trujillo – Primaria, Sexto grado. Un profesor joven, nuevo y por consiguiente libre de muchos vicios que muchos profesores de las escuelas de gobierno adoptan con el tiempo.

Marcela Torres – Secundaria, Profesora de química y física. Me encantaban sus clases. Era muy «buena onda», pero no te perdonaba que no hicieras tu trabajo. Ahh y olvidé mencionar que me parecía muy guapa (sonrojado), ya saben, la edad de los amores platónicos.

Francisco Ulloa – Medio Superior, Profesor de matemáticas. Uno de los más excéntricos profesores  que he conocido. Recuerdo que la primera vez que lo vi pensé que era del personal de intendencia. Una mente admirable aunque algo amargado y con un humor negro. No se tentaba el corazón para decirte las cosas.

Jesús Olivares – Medio Superior, Profesor de microprocesadores. Genial, sin temor a equivocarme diría que fue él quien hizo que valiera la pena la especialidad de Sistemas Digitales. Aprendimos muchísimo más de lo que se esperaba en nuestras materias de microprocesadores. Hubo días que en verdad le sufrimos, pero nunca se conformaba, siempre estuvo a la expectativa de que le dieramos más.

Eduardo Aldana – Universidad, Profesor de redes. En lo personal nunca me sentí a gusto en su clase y encontraba difícil adaptarme a sus métodos, cosa que no fue así con muchos de mis compañeros. Pero el tipo es un genio y si lo incluyo en la lista es porque recuerdo que una vez nos comentó que cada grupo era un experimento para ver qué cosas como profesor le funcionaban mejor. Aunque su método no fue especialmente útil para mi, su actitud me pareción sincera y encomiable, los profesores deben estar dispuestos a renovarse y mejorar si es necesario, la educación sería algo distinto si todos pensaramos asi. Como anécdota un tanto vergonzosa les platicaré que estuve a punto de tronar el segundo semestre de redes por escasas décimas de punto y Aldana, en algo así como un acto de lástima por mí, terminó redondeando mi calificación a 6.